Estados Unidos a 17 de abril, 2024.- En una reciente decisión legal, el juez Brian Cogan, quien previamente sentenció a Joaquín «El Chapo» Guzmán a cadena perpetua, ha rechazado la solicitud del narcotraficante para recibir visitas de su esposa, Emma Coronel, y sus hijas, Emaly Guadalupe y María Joaquina, en la prisión de máxima seguridad ADX Florence. Esta negativa también se extiende a la comunicación telefónica, lo que subraya las estrictas condiciones bajo las que Guzmán está confinado.
La decisión fue anunciada este martes, detallando que la solicitud de Guzmán para modificar sus condiciones de confinamiento fue denegada, con la recomendación de que cualquier petición de este tipo debería dirigirse al Buró Federal de Prisiones, y no a la corte. Esta resolución se alinea con las normas de seguridad extremadamente rígidas que caracterizan al ADX Florence, conocida como la «Alcatraz de las Montañas Rocosas», donde se albergan algunos de los criminales más peligrosos del país.
La solicitud de Guzmán, fechada el 20 de marzo, fue un esfuerzo por mantener algún nivel de conexión con su familia, argumentando que Coronel, quien fue liberada de prisión en septiembre de 2023 tras admitir su rol en el cártel de Sinaloa, posee la visa necesaria y podría llevar a sus hijas durante las vacaciones escolares.
Los analistas legales destacan que las restricciones impuestas a Guzmán son parte de un esfuerzo por limitar su influencia y prevenir cualquier posible coordinación con el cártel de Sinaloa. Durante su tiempo en prisiones mexicanas, incluido el Altiplano, Guzmán había logrado comunicarse con miembros del cártel, lo que finalmente facilitó su escape en 2015 antes de ser recapturado en 2016.
La negativa a permitir estas visitas subraya la seriedad con la que las autoridades estadounidenses están manejando la post-condena de Guzmán, cuya historia ha sido marcada por la violencia y el escape. Según expertos en seguridad penitenciaria, estas medidas son cruciales para mantener el orden y la seguridad tanto dentro de la prisión como en la sociedad en general.
La historia de Guzmán continúa atrayendo la atención internacional, reflejando no solo su notoriedad sino también las complejas interacciones entre el crimen organizado y la justicia penal.