Este país latinoamericano se destaca en el mundo por su fanatismo por el whisky
Editor web Maya Comunicación 
El ranking de consumo de whisky en el mundo está dominado por países del hemisferio norte y, sin embargo, una nación latinoamericana sorprende al ubicarse en un cómodo segundo lugar.
Si bien el Cono Sur de Sudamérica suele asociarse al consumo de vino, un país de la región se destaca en el mundo por su alto consumo de whisky. Y es que desde hace años el ranking de los países que consumen más whisky tiene a Uruguay en segundo lugar y muy por encima de la media latinoamericana.
Los últimos datos sobre consumo mundial de whisky están encabezados por Francia, que bebe un promedio de 2,15 litros por persona por año. Para muchos, la sorpresa está en el segundo lugar, ocupado por los uruguayos, que consumen 1,77 litros por persona por año. El podio se cierra con EEUU, con un consumo de 1,41 litros anuales per capita.
Australia, con 1,3 litros, y España, con 1,29 litros, cierran el top cinco de los países más consumidores.
El segundo puesto que los uruguayos se ganaron a fuerza de beber whisky sorprende aún más al compararlo con el resto de los países latinoamericanos. En efecto, para encontrar otra nación latinoamericana hay que bajar hasta el puesto 12, donde se ubica Venezuela, con un consumo de 0,91 litros por persona.
Entre los uruguayos, las preferencias se las llevan las marcas extranjeras. De hecho, según datos de 2019 solo el 14% del whisky consumido en Uruguay es de fabricación nacional y la preferencia sigue estando en whiskies escoceses, estadounidenses o irlandeses.
Según un ranking hecho por la plataforma Mercado Libre en Uruguay, el whisky más vendido entre los uruguayos es el estadounidense Jack Daniels. En segundo lugar aparece el escocés Chivas Regal y, en tercer puesto el también escocés White Horse.
La causa del fanatismo de los uruguayos por el whisky no ha encontrado una explicación clara. En un país vecino y con costumbres similares como Argentina, el consumo de esta bebida está lejos de estar tan extendido y sigue muy por debajo de la cerveza o el vino.
