China entró hoy en el año 4721 de su calendario bajo la regencia del Conejo, un animal que según la mitología es el más auspicioso de todos y encarna la prosperidad, la felicidad y la longevidad.
La bienvenida a la Fiesta de la Primavera, como se denomina el comienzo del nuevo ciclo del almanaque lunar, trascurre en medio de costumbres y rituales que durante siglos perviven en este territorio para atraer la fortuna, la salud y el éxito.
Una de ellas es que se abran las puertas y ventanas de los hogares para se vaya con todo lo malo el año viejo, comandado por el Tigre.
En el primer día del año también se recomienda no bañarse, lavarse el cabello, sacar la basura al exterior ni barrer la casa para retener las riquezas.
Las decoraciones en rojo y dorado son detalles imprescindibles porque además de ser colores de buen augurio, ayudan a ahuyentar seres malignos como la bestia llamada Nián.
China disfruta de una semana se feriados con un amplio plan de actividades que incluye el regreso de las ferias en templos y espectáculos diversos para resaltar las tradiciones de antaño.
Con el ascenso al trono del Conejo, su población espera vivir 12 meses donde cobrará más importancia la gentileza, crecerá el optimismo y los negocios florecerán.
De acuerdo con la creencia popular, el perfil del animal hará que en la nueva etapa del almanaque todos sean más ágiles, disfruten de mejor salud y también de gran felicidad.
Como una de sus características es la fertilidad, se espera que sea un período en el cual se reviertan las cifras negativas que muestra China en la cantidad de matrimonios y nacimientos.
Además, será propicio en los esfuerzos para mantener la paz y alentar las comunicaciones interpersonales.